Simón Ramírez: El reflejo de una mala relación entre juveniles y la S.A. acerera

Hace bastantes años que la cantera de Huachipato es una de las más generosas de Chile. Gonzalo Jara, Rodrigo Millar, Pedro Morales, Edson Puch, Brayan Véjar y Martín Rodríguez son algunos de los más reconocidos que han nacido en el club siderúrgico. Muchos de esos nombres no sólo significaron buenos resultados deportivos, sino que se tradujeron también en ganancias cuantiosas para el bolsillo acerero.

Hoy, Huachipato cuenta en su plantel profesional con una buena cantidad de jugadores nacidos y criados en el club: Martín Molini, Víctor Dávila, Jimmy Martínez, Leonardo Povea, José Bizama, Kevin Hidalgo, Camilo Pontoni, entre otros que frecuentan la titularidad. Es con Ramírez donde se debe hacer un análisis más profundo: lateral derecho, mundialista sub 17 en 2015, actualmente luchando por un puesto en el combinado sub 20 que disputará el Sudamericano en enero próximo.

Debutó con Huachipato en un amistoso que acabó en triunfo acerero por 3-0 sobre Fernández Vial en el Ester Roa Rebolledo. En el torneo local, hizo su estreno en el empate 1-1 ante San Marcos de Arica, correspondiente a la fecha 8 del Clausura 2016. A partir de ahí, a punta esfuerzo y buen juego, se adueñó de la titularidad de la banda derecha de la ‘usina’. Fue titular en 21 de los 22 partidos que disputó este año con la camiseta siderúrgica.

Pese a su gran año con el club, de un momento a otro dejó de ser citado súbitamente por el técnico Miguel Ponce, causando la extrañeza de los hinchas. La razón era insospechada e increíblemente ridícula: la dirigencia no llegó a acuerdo con su representante para firmar su primer contrato. Como sabemos, los sueldos que está pagando el club a sus canteranos son bajos. Por lo tanto, Simón y su representante consideraron insuficiente la suma y decidieron manejar otras opciones.

Días atrás, diversos medios nacionales informaron la posible partida de Simón Ramírez al Benfica, pero ¿cuál es el problema con esto? Simple, Simón Ramírez, al no tener contrato, es adquirido por el club portugués por una suma nula, ya que solo debe cancelar por los derechos de formación. Recordemos que en 2012, Colo Colo tuvo una experiencia similar con Bryan Rabello, que al cumplir 18 años no aceptó firmar contrato con los albos y se marchó del club, dejando a Blanco y Negro sin ganancia alguna.

Huachipato, o mejor dicho la Sociedad Anónima que dirige la institución, ha desperdiciado una gran oportunidad de una cuantiosa venta futura, considerando que Simón Ramírez es uno de los jugadores con mayor proyección del fútbol chileno. No solo por los antecedentes anteriormente mencionados, sino por el gran nivel que mostró a lo largo del año, dando para pensar que es una seria opción de renovación para la banda derecha de la ‘Roja’ adulta.

La S.A. debe poner más de su parte, invertir un poco más, para que en el futuro pueda hacer buenas ventas y así ir creciendo con ‘su negocio’. Se espera que con otros jugadores de proyección como Dávila, Martínez, ambos seleccionados nacionales en su categoría, o Povea, se tomen buenas decisiones, para que el club siga creciendo y siendo ‘la cantera de Chile’, como ha sido la tónica en los últimos años.