El salvavidas de la prensa nacional

Sin dudas, estas son las semanas más difíciles del periodismo deportivo nacional. En estos días sin fútbol criollo, es normal ver como el 'humo' de posibles traspasos se toma la agenda. Cuesta crear una pauta concreta. En estos días, la desafiliación de Lota Schwager les cayó del cielo.

No me agrada mucho ver a la prensa nacional (santiaguina) hablando de la crisis que vive el fútbol regional. Porque por una parte, claro que es bueno, se informa al país lo que está viviendo nuestra región, pero por otra parte, es el mejor salvavidas en estos días sin fútbol chileno ¿Por qué no hablaron de esto antes, y esperaron a que la desafiliación fuera un hecho para poner el tema sobre la mesa?

Cuando el plantel de Lota Schwager amenazó con no presentarse a jugar el partido ante Naval, por sueldos impagos, en Santiago se disputó el 'duelo de subcampeones', entre Unión Española y O'Higgins. Este duelo otorgó un cupo a la Libertadores y otro a la Sudamericana, para el ganador y el perdedor, respectivamente, y de paso, cerró el Apertura. Terminó el compromiso y "se acabó el fútbol chileno", decían los periodistas. Días después, se disputó la última fecha del año en Segunda División ¿Acaso esto no es fútbol chileno?

Antes del partido con Naval, fueron los propios hinchas de Coronel quienes aportaron canastas de alimentos a los jugadores, conscientes que estos no recibían su salario hace dos meses. Comprometidos con el club y actuando "por amor a los colores", como lo declararon varios jugadores, Lota Schwager se presentó en Talcahuano.

Al partido en El Morro, parte del equipo llegó en un furgón escolar manejado por un propio hincha, porque no habían lucas para pagar un bus como lo hacen los equipos de Primera. Pero en la prensa esto no salió, ¿qué informaron? la detención de Freddy Barahona. Tampoco se habló del 3-3, que a todo esto fue un partidazo. Los de Coronel con dos jugadores menos varios minutos del encuentro. El partido entre Naval y Lota pasó a segundo plano. El fútbol de Segunda no importaba, tampoco, la situación dirigencial que vivían por culpa de Valdés.

"Se desató la crisis en la Región del Bío-Bío" escuché en un par de canales. Y claro, la Octava vive uno de sus peores momentos, con solo dos equipos en Primera, uno de ellos colistas; con dos clubes en la 'B' que no superan el décimo lugar en la tabla; con un Naval que arrasó en la fase zonal, pero que en la nacional no encuentra el rumbo; con un histórico Fernández Vial en el amateurismo, con hinchas calificando la campaña como un fracaso, pues no ascendieron; y con dos equipos desafiliados por culpa de inescrupulosos que vieron en estos tradicionales clubes la opción de llenar sus bolsillos.

Señores, esto es crisis, no perder tres partidos seguidos, como lo decretan cuando pasa con los llamados 'tres grandes'. La región vive una crisis, no la U que tuvo dos cuerpos técnicos en un semestre. Esta situación es crítica, no la que vivió Guede cuando plantó la ruda.

FOTOGRAFÍA: ÓSCAR PINO